Las denuncias por prácticas ilegales de rehabilitación kinesiológica domiciliaria, una prestación ofrecida por empresas privadas que, en muchos casos es tercerizada por obras sociales y pone en riesgo la salud de los pacientes, aumentaron el último año, según alertó el Colegio de Kinesiólogos de la provincia de Buenos Aires (Cokiba).
La comisión de Ejercicio Profesional del Colegio de Kinesiólogos informó que intervino sobre las denuncias recibidas y exigió a las empresas que desistan de ofrecer tratamientos de rehabilitación con personal sin título habilitante para ejercer la kinesiología y también elevó informes de cada caso al Ministerio de Salud provincial, “principal agente de control de los profesionales de la salud y de las empresas de atención domiciliaria, para que intervenga con inspecciones”.
“Se trata de empresas que, de manera privada o como prestadoras subsidiarias de obras sociales, se presentan ofreciendo tratamientos con equipos multidisciplinarios integrados por médicos, fisiatras, traumatólogos, psicólogos y kinesiólogos, entre otros profesionales”, precisó el Cokiba.