Benoit Hamon, el candidato más progresista, ganó las primarias del socialismo francés

El candidato del ala progresista del socialismo francés, Benoit Hamon, ganó este domingo las primarias presidenciales del oficialismo con el 58,65% de los votos frente a un 41,35% que cosechó su rival, el ex primer ministro Manuel Valls, en una disputada segunda vuelta, según resultados preliminares con el 60% de las mesas escrutadas, informó la prensa local.

El candidato del ala progresista del socialismo francés, Benoit Hamon, ganó este domingo la segunda vuelta de las primarias presidenciales del oficialismo con 58,65% de los votos frente a 41,35% que cosechó su rival, el ex primer ministro Manuel Valls, y se convirtió en el hombre que disputará la presidencia de Francia en los comicios de abril.

Así lo anunció hoy Christophe Borgel, responsable del comité organizador de las primarias tras escrutarse 60% de las mesas.
Con este resultado, el candidato más crítico a la gestión del mandatario Francois Hollande se consagró ganador con una aplastante victoria que lo encumbró como el candidato presidencial, pero también como el armador central de una fragmentada izquierda francesa.

“Esta noche la izquierda levanta la cabeza, ustedes son el corazón valiente y luchador de Francia, su movilización es la prueba de una izquierda vibrante y viva que me da una gran fuerza para representarlos y ganar esta elección presidencial; esta noche la izquierda levanta la cabeza y gira hacia el futuro y quiere ganar”, dijo Hamon apenas conoció los resultados en el búnker socialista del calle Solférino, en París.

En realidad, las encuestas de los últimos meses vienen repitiendo que sea cual fuere el candidato socialista, no conseguirá pasar a la segunda vuelta, a la que pasarían el líder de la derecha, Francois Fillon, y la de la extrema derecha, Marine Le Pen.

De hecho, podría quedar quinto -incluso detrás de la izquierda más rebelde, Jean Luc Mélenchon, y de Emmanuel Macrón, ex ministro de Economía de Hollande.

Ante este panorama, el hombre revelación del socialismo dijo hoy ante la prensa y sus afiliados: “Tengo la convicción de que frente a una derecha de privilegios, conservadora, y a una extrema derecha destructora, nuestro país quiere una izquierda que piense el mundo tal como es y no tal como era, una izquierda capaz de aportar un futuro deseable”.

E hizo un potente llamamiento de unión a la izquierda francesa encarnada en hombres como Yannick Jadot -un ambientalista del Europarlamento- y al ex socialista Mélenchon para “construir una mayoria y formar un gobierno social, económico y democrático”.

Hamon, ex ministro de Educación, que defiende un perfil más izquierdista en el partido del jefe de Estado François Hollande, se impuso ampliamente a Valls, quien rápidamente reconoció la derrota como una “parte de la vida política y de la democracia” y contó que ya había hablado con Hamon para felicitarlo.

“Siempre he mantenido el sentido de la acción colectiva y de la lealtad y voy a respetar los compromisos adquiridos, Benoit Hamon es el candidato de nuestra familia política, le toca a él llevar a adelante esta bella misión, le deseo buena suerte”.

La hora de Hamon ha comenzado. Este político, de 49 años, y militante socialista desde los 19 que que le dio un portazo al gobierno de Holande en agosto de 2014, tendrá la dura tarea de dar la vuelta a unas encuestas adversas para las presidenciales.

Benoit Hamon, un histórico del ala crítica del Partido Socialista (PS), con clara influencia entre los jóvenes de la izquierda urbana, se autodefine como “ecosocialista” o “socialecologista”.

Licenciado en Historia, ex ministro e Economía Social y de Educación entre 2012 y 2014, Hamon ganó entre las filas socialistas con un discurso anticapitalista, anticonsumo, ecologista y humanista y también, europeísta.

En su ideario enarbola la legalización del cannabis y una política penitenciaria con penas más cortas y un estado fuerte.

Además, quiere derogar la polémica reforma laboral francesa, darle visas a los refugiados e imponer un impuesto a los robots.
Pero la vedette de su programa es establecer un salario social universal de, al menos, 600 euros para los mayores de 25 años. “¿De dónde va a salir ese dinero?”, lo cuestionaron sus rivales en las primarias. Y él, tranquilo, respondió: “Del mismo lugar del que salieron los 40.000 millones que este gobierno le dio a las empresas”.

Hamon también mira puertas afuera de Francia y se declara pro europeo frente a una ultraderecha escéptica que escala entre los votantes. “Necesitamos una Europa que defienda más a los ciudadanos. Hay que reforzar las fronteras exteriores de la UE, no las nacionales. El déficit vale poco frente al riesgo de Marine Le Pen”, sentenció.

Nacido en la pequeña localidad bretona de Saint-Renan, al noroeste de Francia, este candidato tuvo su gran momento político a comienzos de los 90, cuando se convirtió en el primer presidente de las juventudes socialistas y a partir de ahí, construyó una larga carrera.

Entre 1995 y 2000 pasó a ser asesor del entonces líder del PS, Lionel Jospin, y posteriormente de Martine Aubry cuando fue ministra de Trabajo e ideó e instauró la semana laboral de las 35 horas.

Entre 2004 y 2009 ocupó una acta en el Parlamento Europeo y más tarde se convirtió en vocero del Partido Socialista (2008-2012), hasta que en 2012 fue escogido diputado en la Asamblea Nacional.

Fue criticado y tildado de “derrochador y utópico”, pero eso no le impidió conquistar el voto de muchos jóvenes en medio de la impopularidad entre los socialistas y del ascenso del social-liberal Macron y de la ultraderechista Le Pen.

Este domingo votaron unos dos millones de personas frente a los más de 1,6 millones que lo hicieron en la primera y los 4 millones que lo habían hecho en diciembre pasado en las primarias de la derecha.

http://www.telam.com.ar/notas/201701/178214-hamon-candidato-francia-socialismo.html

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