Debatieron sobre el nuevo Registro de Violencia Institucional

Implementación del Registro de Violencia Institucional bajo la órbita del Ministerio Público bonaerense.

Representantes de los tres poderes del Estado arribaron al Teatro Coliseo Podestá de La Plata, con el objetivo de discutir en torno al nuevo Registro y compartir los lineamientos fundamentales del mismo.

Ante un auditorio colmado, el primero en tomar la palabra fue el Procurador General de la Suprema Corte, Julio Conte Grand, quien destacó el fuerte compromiso de los presentes con el tema.

“La presencia de los tres poderes constituidos tiene una importancia sustancial”, indicó en su intervención y planteó la necesidad de incorporar a todos los sectores comprometidos para combatir este tipo de violencia.

Además, ponderó la figura del vicegobernador Daniel Salvador, al resaltar su historia de lucha por los derechos humanos.

Posteriormente, la presidenta de la Suprema Corte, Hilda Kogan, explicó que el Registro pone el acento en las actuaciones de los que tienen que llevar adelante la investigación. “Una justicia tardía no es justicia y se transforma en generadora de mayor violencia institucional”, dijo.

Otro de los integrantes de la mesa de apertura fue el presidente de la Cámara de Diputados, Manuel Mosca, quien resaltó el compromiso de todos los sectores “por preservar los derechos humanos”.

En ese sentido, enfatizó en las transformaciones suscitadas por la decisión política de la gobernadora María Eugenia Vidal en materia de seguridad, y puso como ejemplo los avances en el servicio penitenciario.

En el cierre, Daniel Salvador explicó que la democracia “tiene la deuda enorme de recuperar la tranquilidad para los argentinos” e instó a respaldar férreamente el Registro.

“El control y la prevención garantiza de que no haya abusos y eso consolida la idea de vivir en una Argentina y una Provincia donde el valor de la seguridad sea recuperado”, esgrimió.

El titular del Senado bonaerense también planteó el desafío de encarar reformas importantes y no soluciones superficiales. “No se trata de aparentar estar mejor sino generar una transformación y hacerla en el marco de los derechos humanos”, dijo.

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