Para el titular de la Corte ese organismo “tiene una estructura muy parlamentaria, deliberativa”. Para investigar más a fondo los casos de corrupción, reclamó “adoptar medidas que permitan que las investigaciones sean posibles”.
El presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, ratificó la inconstitucionalidad de la ley de subrogancias, respecto a cuya polémica señaló que “lo que se decidió en la reunión de presidentes de Cámara federales es que la subrogancia debe ser algo excepcional y no generalizada. Y el Consejo de la Magistratura trató de respetar esta decisión, que las Cámaras sean las que designen los subrogantes”.
Ante las críticas públicas hacia los jueces o los intentos por desplazarlos de causas más polémicas, aclaró que “la función del Poder Judicial no es intervenir en las elecciones ni gobernar, sino decidir las causas judiciales. Y en eso nosotros debemos ser muy firmes en fortalecer la independencia de la Justicia”.
“Los jueces tienen que resolver rápidamente las causas, porque la sociedad espera que la Justicia sea efectiva y no consagre la impunidad en los diversos casos que se presentan”, puntualizó.
Sobre el Consejo de la Magistratura, consideró que “necesita reformas”, por cuanto “tiene una estructura muy parlamentaria, deliberativa, para un organismo que debe tomar decisiones rápidas”.
En sendas entrevistas con Clarín y La Nación, resaltó que “la Corte tiene la suficiente fortaleza para pasar por cualquier tipo de trance. Nuestra obligación es con la población, no con los demás poderes del Estado, entonces -digan lo que digan- nuestra función es aplicar la ley y estar por encima de estas disputas”. O sea que, agregó, “no hay acá ninguna cuestión que nos conmueva. La sociedad tiene que saber que la Corte siempre va a cuidar de los ciudadanos, y va a seguir la misma línea, esté quien esté”.
Con relación al proyecto original del Código Civil y Comercial que redactó y al que se le hicieron cambios, consideró que “hay cambios que no hemos compartido, pero no alteraron la sustancia del anteproyecto. Son las reformas que introdujo el Poder Ejecutivo, pero en el resto quedó consolidado, está enfocado en dar respuesta a los problemas concretos y ya tiene un nivel de aplicación importantísimo”.
Con relación a la investigación de casos de corrupción, Lorenzetti dijo que “la Corte ha sido muy firme en la lucha contra la corrupción y lo seguirá siendo”, pero reclamó “adoptar medidas que permitan que las investigaciones sean posibles”. Puso como ejemplo que en Brasil hubo un largo proceso legal, en el cual “se dio competencia a la Corte para juzgar a funcionarios de alto nivel, dictaron la ley de probidad administrativa, sancionaron leyes sobre procedimientos especiales”.
A la luz de los resultados, consideró que “es necesario es que todos los poderes tomen medidas”.
Respecto de la situación del integrante de la Corte Carlos Fayt, que debió soportar este año una fuerte presión política, Lorenzetti contó que “participa de los acuerdos y la decisión de cada ministro de si sigue o no es personal”. Respecto de la citación de funcionarios de la Corte para declarar sobre el tema, por parte del Congreso, dijo que “no se consideró” porque no les parece un tema. “Nosotros somos respetuosos de la decisión que tome el doctor Fayt”, aseguró.
De cara al futuro, pidió que se elabore “un plan de transformación del Poder Judicial para que sea más rápido, más efectivo, y se haga como política de Estado con los tres poderes. No sólo a nivel nacional, sino en las provincias, donde están la mayor parte de los casos”.
“Vamos a proponer una transformación del Poder Judicial basado en todo lo que nosotros creemos que es el respeto de la independencia, una mejor Justicia para la población. Las dos cosas son muy importantes”, puntualizó.
Parlamentario