Científicas del CONICET crearon un producto antimicrobiano con yerba mate

Lograron limitar el crecimiento de bacterias que son perjudiciales para el ser humano. Enterate quiénes son y cómo lo desarrollaron. Otro orgullo de la universidad pública.

Dos bacterias fuertemente perjudiciales para la salud humana y que generan la muerte en miles de personas cada año, serán combatidas a partir de ahora gracias a una brillante investigación de científicas del CONICET. Se trata de las Escherichia coli y Estreptococo, tal vez de las más perjudiciales para nuestra especie y que generan millones de complicaciones en la salud.La novedad acaba de publicarse en Waste and Biomass Valorization.

En un programa en el que se busca economizar procesos sin generar contaminación y a la vez reducir, eliminar o reutilizar los residuos del ambiente, Patricia Vázquez y Romina Arreche, lideraron el proyecto argentino y obtuvieron un producto antimicrobiano a partir de la yerba mate.

¿Cómo es esto? Las investigadoras realizaron las pruebas con los residuos del mate y probaron así la inhibición que la misma generaba en estas bacterias. Para tener todos los parámetros bajo control, se simuló en el laboratorio una cebada completa de la popular infusión. Lo primero fue moler el producto para reducir su tamaño.

Al respecto, Romina Arreche, becaria posdoctoral del CONICET y primera autora del trabajo, señaló: “Dejamos 10 gramos de yerba en un recipiente con 100 mililitros de agua a 70 grados centígrados durante 30 minutos, el tiempo estimado de una ronda”. Según remarcó, de ese tratamiento se separó un extracto líquido con sustancias bioactivas de la yerba y, por otro lado, el residuo sólido equivalente al que se tira a la basura luego de tomar.

Según relató, esa sustancia fue puesta en contacto con un elemento químico que se llama sal de plata, que posee conocidas propiedades antimicrobianas, es decir que inhibe el desarrollo de virus, bacterias y hongos.

Luego de permanecer unas cuantas horas bajo estudio, la solución obtenida fue utilizada como medio de cultivo para esas dos bacterias: Escherichia coli, que normalmente habita en el intestino del humano y de algunos animales pero que posee algunas cepas nocivas para la salud; y Staphylococcus aureus, en general responsable de causar infecciones en la piel. Puede producir también una amplia gama de enfermedades, que van desde infecciones cutáneas y de las mucosas, tales como foliculitis o conjuntivitis, hasta enfermedades de riesgo, abscesos profundos, osteomielitis, meningitis, sepsis, endocarditis o neumonía.

Al fin de la investigación, ninguna de las dos pudo reproducirse normalmente. La inhibición de los microorganismos patógenos se logró con una concentración bajísima de nanopartículas.

Por último, Patricia Vázquez, investigadora principal del CONICET y referente del grupo de química verde del CINDECA, dijo que “las propiedades antimicrobianas de la plata se conocen desde hace mucho tiempo, y de hecho hay numerosas investigaciones que prueban la obtención de sus nanopartículas a partir de extractos, pero ninguna lo había hecho con yerba”.

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